En la más reciente muestra del Intel Developer Forum (IDF), Intel ha dado a conocer las líneas generales de sus investigaciones para desarrollar productos electrónicos más inteligentes, seguros y capaces de adaptarse a las personas que los emplean.
Con estos nuevos desarrollos la compañía espera presenta sistemas que respondan de forma intuitiva a las personas y a sus necesidades, como una respuesta a lo que al interior de Intel consideran como el futuro de la electrónica y a lo que ellos mismos denominan como “plataformas conocedoras de los usuarios”.
Dichas plataformas estarán integradas por dispositivos que podrán cuidarse por sí mismos, saber quiénes son sus usuarios, ubicarse espacial y temporalmente y anticiparse a lo que sus propietarios deseen hacer. Para lograr todo esto, deberán contar con niveles de inteligencia que les permitan interpretar las necesidades de sus usuarios y colaborar con otros dispositivos para realizar acciones simultáneas.
Para el desarrollo de esta nueva tecnología adaptable se plantean nuevos retos en el desarrollo de hardware, software, servicios, interfaces y componentes que le hagan viable. Es por esto que Intel ya se encuentra desarrollando sus arquitecturas de procesadores para obtener un rendimiento parecido al de los supercomputadores mediante la utilización de múltiples núcleos en cada procesador.
Así, cada procesador será capaz de asignar de forma dinámica núcleos de procesamiento individuales o en grupo junto con la memoria y el ancho de banda necesarios para tareas específicas como, por ejemplo, la visualización, escucha, seguridad de red, juegos, y comandos para el conocimiento.
Con estos nuevos desarrollos la compañía espera presenta sistemas que respondan de forma intuitiva a las personas y a sus necesidades, como una respuesta a lo que al interior de Intel consideran como el futuro de la electrónica y a lo que ellos mismos denominan como “plataformas conocedoras de los usuarios”.
Dichas plataformas estarán integradas por dispositivos que podrán cuidarse por sí mismos, saber quiénes son sus usuarios, ubicarse espacial y temporalmente y anticiparse a lo que sus propietarios deseen hacer. Para lograr todo esto, deberán contar con niveles de inteligencia que les permitan interpretar las necesidades de sus usuarios y colaborar con otros dispositivos para realizar acciones simultáneas.
Para el desarrollo de esta nueva tecnología adaptable se plantean nuevos retos en el desarrollo de hardware, software, servicios, interfaces y componentes que le hagan viable. Es por esto que Intel ya se encuentra desarrollando sus arquitecturas de procesadores para obtener un rendimiento parecido al de los supercomputadores mediante la utilización de múltiples núcleos en cada procesador.
Así, cada procesador será capaz de asignar de forma dinámica núcleos de procesamiento individuales o en grupo junto con la memoria y el ancho de banda necesarios para tareas específicas como, por ejemplo, la visualización, escucha, seguridad de red, juegos, y comandos para el conocimiento.
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